Has vivido experiencias intensas, y seguiste adelante porque no había otra opción.

Aun así, sientes que algo no va bien —o tal vez dejaste situaciones sin resolver, y hoy te están pasando factura.

​

• Te cuesta disfrutar de la vida o sentirte emocionalmente segurx.

• Tienes miedo de que nada cambie nunca y de seguir sintiéndote incompletx o infeliz.

• Recuerdas tu infancia con dolor.

• Tu relación con tus padres o cuidadores nunca fue buena, y aún pesa sobre ti.

• Tus relaciones con los demás no son fáciles ni satisfactorias.

• Tu cuerpo habla: ansiedad, insomnio, dolores crónicos y sensaciones internas difíciles de tolerar —como palpitaciones, opresión en el pecho, dificultad para respirar o presión en el pecho, la cabeza, la garganta o el estómago.

• Siempre estás cansadx —incluso cuando descansas.

• Estás atrapadx en adicciones o hábitos que intentan calmar tu sufrimiento, pero no lo consiguen.

• El mundo te parece un lugar inseguro. No puedes confiar en los demás —ni en ti mismx.

​

No estás rotx. Tu cuerpo está protegiéndote. Y existe un camino hacia adelante.

 

Te acompañaré a reconectar con tu cuerpo, liberar lo que quedó atrapado dentro y recuperar la vitalidad que aún vive en ti —mientras descubres, con suavidad, el sentido de tu historia personal.
Podrás crear un nuevo comienzo.